Este miércoles se conoció la triste noticia de la muerte de Sinéad O’Connor. La famosa cantante irlandesa tenía 56 años y aún no se conoce la causa de su fallecimiento. Durante toda su vida, la artista luchó con problemas de salud mental y en 2015 incluso tuvo un intento de suicidio, pero la policía logró rescatarla luego de que en su cuenta de Facebook deje un mensaje anunciando su sobredosis.
El cover que la catapultó a la fama
O’Connor fue conocida por su majestuosa voz y su exitosa versión de “Nothing Compares 2 U” de Prince. Su camino en la música comenzó en 1987 con el álbum The Lion and the Cobra, al que le siguió el gran éxito I Do Not Want What I Haven’t Got, que vio la luz en 1990 y contiene el mencionado cover.
Este disco vendió millones de copias en todo el mundo y recibió el premio Grammy a Mejor álbum de música alternativa. Terminada la década del 90, la popularidad de O’Connor comenzó a descender y su último trabajo discográfico data de 2014: I’m Not Bossy, I’m the Boss.
Una vida marcada por sus problemas de salud mental
En lo que respecta a su vida privada, Sinéad fue diagnosticada con trastorno bipolar en 2003. Luego de su intento de suicidio en 2015, la cantante tendría varios episodios similares, los cuales en muchas ocasiones fueron comunicados al público por medios de redes sociales. O’Connor cambió su nombre en dos oportunidades: en 2017 se rebautizó como Magda Davitt y en 2018 pasó llamarse Shuhada’ Sadaqat por su conversión al Islam.
A principios de 2022 su hijo de 17 años se quitó la vida luego de haberse escapado de un hospital donde recibía tratamiento de salud mental. En su cuenta de Twitter, la compositora e intérprete escribió: “Desde entonces, vivo como una criatura nocturna no muerta. Fue el amor de mi vida, la lámpara de mi alma”.
Fuente: IndieHoy
La carrera de Sinéad O´Connor recibió un golpe importante – sobre todo en los Estados Unidos – el 3 de octubre de 1992, cuando apareció en Saturday Night Live como invitada musical, durante un episodio de la temporada 18 (temporada 1992-1993), conducido por Tim Robbins. Ella cantó a capella la canción “War” de Bob Marley, que pretendía ser una protesta por los abusos sexuales de sacerdotes de la Iglesia católica, cambiando la palabra “racismo” por “abuso de menores”. Luego presentó una foto del papa Juan Pablo II a la cámara mientras cantaba la palabra “evil” (maldad); después de romper la foto en trozos, pronunció la frase “lucha contra el verdadero enemigo” (fight the real enemy) y arrojó los pedazos hacia la cámara. Casi de inmediato, los teléfonos de la NBC se saturaron con miles de quejas.
La reacción a la acción de Sinéad fue rápida. En los medios de comunicación se causó una conmoción, siendo Sinéad abucheada numerosas veces para que se retirara de escenarios. También hubo numerosas quemas y destrucciones públicas de sus discos, así como muchas estaciones de radio que se negaron a transmitir sus canciones. Todavía hasta 2008, la NBC se ha negado a repetir la secuencia donde Sinéad rompe la foto del papa, únicamente refiriéndose al hecho y colocando otra secuencia en su lugar (donde Sinéad muestra una foto de un niño africano desnutrido y luego abandona el escenario); de todos modos, la secuencia está disponible en el volumen 4 del DVD Saturday Night Live, 25 Years of Music, con una introducción de Lorne Michaels.
Como una disculpa para los televidentes, durante el monólogo de apertura de la siguiente semana, el actor Joe Pesci mostró una foto del Papa, diciendo que la había pegado con cinta adhesiva. También explicó que, si hubiera sido en su show, “le habría dado una gran bofetada”.
Esta acción de Sinéad también ha sido motivo de parodias posteriormente. En 1993, Madonna se presentó en este mismo programa, en un episodio conducido por Harvey Keitel, interpretó “Bad Girl” y, al final de su presentación, mostró una foto de Joey Buttafuoco, diciendo, al igual que Sinéad, “lucha contra el verdadero enemigo” y la rompió en pedazos, tal como hiciera Sinéad.
El 22 de septiembre de 1997, Sinéad fue entrevistada por el semanario italiano Vita. En la entrevista le pidió al Papa que la perdonara. Dijo que romper la foto fue un acto ridículo, el gesto de una chica rebelde. Afirmó entonces haberlo hecho “porque estaba en rebelión contra la fe, pero la fe aún está conmigo”; también citó a San Agustín, diciendo “la ira es el primer paso hacia el coraje”.
Sin embargo, O’Connor no se arrepintió de sus acciones. En una entrevista con Salon.com en el 2002, en momentos en que ya había muchas más denuncias de abuso sexual de menores por parte de curas, le preguntaron si cambiaría algo de su aparición en Saturday Night Live, a lo que contestó: “¡Por supuesto que no!”.
